INTRODUCCION ACLARATORIA SOBRE EL FOGAJE 1495

Toda la documentacion y datos que aparecen en este apartado de los fuegos estan sacados del interesante libro:
"La poblacion de Aragon, segun el fogaje de 1495" / Antonio Serrano Montalvo.- [Zaragoza: Institucion "Fernando el Catolico", Dpto. de Econimia y Hacienda, Instituto Aragones de Estadistica, 1995].
(Basado en un manuscrito que consta de 756 folios en el que se registra todo el fogaje de Aragon de este año de 1495)

Forman un fuego todas aquellas personas que habitan en una casa y tomen la dispensa de un superior o pater familias continuamente en dicha casa, lo que ha de jurar el superior o pater familias.
(Cortes de Tarazona de 1495, realizadas en la Iglesia de la Magdalena de dicha ciudad)

El importantisimo censo de 1495, que en este libro se da a la luz, es hijo de la politica internacional de Fernando el Catolico y de la necesidad de proteger la integridad territorial del reino de Aragon. En un momento economico complicado, con las cosechas agostadas por la langosta y Zaragoza diezmada por la peste, su elaboracion se constituye en pieza maestra de una estrategia defensiva que el soberano pondra rapidamente en marcha, con alta velocidad de reflejos, en cuanto tiene noticia, en Burgos, de la intencion de Carlos VIII de Francia de invadir el reino: se despacha correo a Europa denunciando esta empresa belica, se ponen en estado de alerta las fortalezas defensivas de la linea pirenaica, se retiran todos los ganados que pastorean en el valle del Ebro y, por encima de todo, se decide poner en marcha, previa consulta al Consejo Real, un procedimiento urgente de financiacion del nuevo ejercito, el cual se considera indispensable para hacer frente a la amenaza exterior. El censo constituye la grandiosa e indispesable operacion previa que hace posible la tasacion y recaudacion del necesario impuesto extraordinario.

El impuesto extraordinario ó sisas recaudatorias (partiendo del censo de fuegos o "fogaje") impuestas en las Cortes de Tarazona para todo el reino de Aragon eran sobre el pan y la carne solamente: dos dineros por la libra de carne (de 36 onzas, peso de Zaragoza), y un sueldo por cahiz de trigo, centeno, cebada y otros "panes" que se molieran durante tres años para comer, a correr desde el primero de noviembre de 1495 hasta el 31 de octubre de 1498.
Estos impuestos o sisas tenian por finalidad financiar un ejercito que defendiera y protegiera al Reino de Aragón contra el posible invasor.


Repartido en los folios 472 y 473 aparecen los nombres de los 95 fuegos que se registran en Villar del Cobo; los apellidos, en general, son claramente de la zona incluso actualmente. El numero de fuegos es bastante notable, solamente superado en el entorno por la ciudad de Albarracin, lo que puede dar la idea de que en este numero estan incluidos los fuegos de lugares todavia no admitidos como pueblos como Griegos o Guadalaviar y que en estos años eran tenidos como barrios del Villar. De hecho, el autor del libro Antonio Serrano Montalvo, al poner los fuegos de Albarracin, suscribe una nota aclaratoria de la falta de diversas entidades entre ellas Griegos.